Buenos días blogueristas de Salma!
Hoy voy apurada de tiempo, bueno hoy y casi siempre, pero no
puedo dejar de comentar una noticia que leí en el periódico.
No sé si sabéis de las polémicas (por no usar otra palabra)
declaraciones de Toni Cantó, partido político UPyD, en relación a la violencia
de género en este país. Resulta que para éste político/actor/otras cosas la
mayoría de denuncias son falsas y un tercio de las muertes son producidas por
mujeres que matan a sus maridos. A groso modo sería ese el comentario lanzado
por Twitter.
Os cuelgo la noticia que con datos y evidencias estadísticas
desmiente sus declaraciones basadas en las intuiciones o no sé en qué.
Esta mañana iba leyendo un artículo sobre la injuria de
Didier Eribon (2000) y comentaba que la injuria se da como acto de ajuste para
regularizar la jerarquía social. Es decir, se injuria para perpetuar el sistema,
para protegerlo. Por tanto, las injurias que van a favor del sistema no se
consideran actos de violencia, aunque lo sean, pero si aquellos que van en
contra del sistema. Por ejemplo, lo que hace Toni Cantó no se considera
violento, pero sí que las mujeres se manifiesten por el derecho de decidir
sobre su propio cuerpo o los homosexuales por quererse casar (entendiendo casar
no como acto religioso sino como modo de protegerse legalmente) y/o tener
hijos. Entended mis palabras en el contexto social español, no en casos
particulares que para nada vemos violenta la lucha de los derechos sino las
injurias sobre las muertes de muchas mujeres.
¡¡Buenos ahí os dejo con la noticia! ¡¡Que tengáis muy buen
día!!
Derribando el bulo de “los Cantó”, El País 26/02/2013:
Como apuntes: "De las 135.540 denuncias interpuestas en el año 2009, podemos concluir
que inicialmente las supuestas denuncias falsas que pudieran haberse
interpuesto son 13. Lo que supone que durante 2009 las posibles
acusaciones y denuncias falsas suponen el 0,0096% del total de las
denuncias interpuestas”. Los datos son similares para 2010 (10 denuncias
consideradas falsas) y 2011 (19)."
Salma and Co.
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